La pignoración es el acto de dar o dejar en prenda algo como una forma de garantía de pago. Es una fórmula que habitualmente utilizan las entidades bancarias a la hora de conceder un préstamo. Sobre todo en aquellos casos en los que el solicitante no ofrece plenas garantías de poder devolver el préstamo.
En los seguros de caución, si el solicitante presenta pocas garantías (ingresos, inmuebles, cuentas anuales de su empresa, etc.), la compañía puede solicitar la pignoración de un porcentaje de la garantía. La pignoración es la inmovilización de capital mientras el aval está emitido. Esto se puede hacer de dos formas. Bien depositando el dinero en la compañía en una cuenta corriente, bien depositando el dinero en un banco con el saldo retenido. El dinero se devuelve o la cuenta corriente queda liberada una vez se devuelve la garantía emitida.
¿La pignoración es obligatoria?
Por norma no. Una vez que se estudie la documentación se indicará si existe o no.